Los
DESIERTOS
son generalmente muy, muy secos. Incluso los desiertos más húmedos llegan a tener menos de 10 pulgadas (25 cm) de precipitación al año.
Algunos desiertos se deben a lo que se llama efecto “rainshadow” (sombra de lluvia). A medida que el aire sube hacia una sierra y se enfría y pierde su capacidad de retener la humead, así que llueve o nieva. Cuando el aire baja por el otro lado de la montaña, se pone más caliente. El aire caliente puede retener mucha humead, así que no llueve tanto y se forma el desierto.